Los inversores, conscientes de la importancia de proteger su poder adquisitivo a largo plazo, encuentran en las inversiones una opción más atractiva que el plazo fijo o el dólar.

En el análisis de "Emprender Simple", los economistas subrayan que el factor clave para lograr rendimientos significativos radica en mantener inversiones a largo plazo, comenzando desde una temprana edad.

El interés compuesto juega un papel esencial en este tipo de inversiones, permitiendo que con el paso del tiempo los rendimientos crezcan y el patrimonio se multiplique.

Para llevar a cabo inversiones exitosas, los especialistas destacan dos aspectos fundamentales:

1. **Paciencia y resistencia a las ganancias rápidas**: Los inversores deben resistir la tentación de buscar ganancias a corto plazo y mantener una visión a largo plazo. La clave está en buscar una rentabilidad sólida y constante, que asegure un crecimiento sostenible del capital.

2. **Conciencia del potencial de crecimiento**: Mantenerse informado y actualizado sobre las tecnologías emergentes y los sectores con oportunidades de crecimiento es esencial para tomar decisiones financieras informadas. Evitar inversiones de alto riesgo que puedan llevar a resultados negativos es parte de esta estrategia.

Tomando como referencia las experiencias del reconocido inversor y multimillonario Warren Buffett, se enfatiza en la importancia de tomar decisiones inteligentes en las inversiones, evitando errores comunes como el afán por ganancias rápidas y la falta de conciencia del potencial de crecimiento en determinados sectores.

El ahorro a largo plazo y la inversión en acciones son las herramientas preferidas por los economistas para lograr un crecimiento sostenido del patrimonio. Con una visión a largo plazo y el poder del interés compuesto, los inversores pueden ver aumentar sus ganancias significativamente con el tiempo.

Una buena inversión puede ayudarte a multiplicar tus ahorros. ¿Es posible incrementar tu capital en nuestro país? Claro que sí. En esta nota hacemos un repaso de las posibilidades de inversión para ayudarte en la decisión.

1. Fondos comunes de inversión

Se trata de un pozo común de dinero compuesto por el aporte de muchos inversores. El mismo es gestionado por profesionales financieros que se dedican a analizar el mercado y elegir distintos activos como bonos, acciones o plazos fijos, con el objetivo de generar ganancias de capital o interés para los inversionistas.

2. Invertir en bonos.

Se trata de un instrumento de renta fija emitido por una empresa o entidad pública para conseguir financiación. Los inversores que compran los bonos obtienen el pago de intereses de manera regular más la devolución del capital inicial invertido una vez que finaliza el préstamo, que cuenta con un esquema de pago preestablecido.

3. Dejar tus ahorros en acciones

Para simplificar: una acción representa una porción del capital social de una empresa y quien las adquiere se convierte en accionista o socio de la misma. De esta manera, el éxito de la empresa se refleja directamente en el precio creciente de su acción. Este tipo de inversión no te permite tener un pago de interés determinado, como en el caso de los bonos. Sus retornos no son fijos, ya que dependen del desempeño de la compañía.

4. Los tan populares plazos fijos

Es un instrumento de inversión de renta fija. Y si bien no es el que más recomendado, tiene muchas ventas: Se opera de forma sencilla, es estandarizado (contás con tasas de interés de antemano) y es uno de los instrumentos más seguros y con menor riesgo de incobrabilidad.

5. Lo último: ahorrar en criptomonedas

Entre las más populares se cuentan Bitcoin y Ethereum, entre otras. Aunque proponen rendimientos muy atractivos, es una inversión bastante arriesgada y se recomienda para aquellos inversores que estén dispuestos a correr riesgo y a tolerar posibles pérdidas.

6. Seguro de ahorro: Una decisión inteligente para proteger tus ahorros

Hay una manera de constituir un capital mes a mes y obtener una rentabilidad invirtiendo tu capital: invirtiendo en un seguro de ahorro. Es una herramienta recomendada para ahorrar y aumentar el valor de tus ingresos, cubriéndote de la inflación. Podés elegir hacerlo en pesos o en dólares y tenés una rentabilidad mínima asegurada ¿Y lo mejor? Que podés tener la tranquilidad de disponer de tu dinero cuando lo necesites. Y además, te permite además reducir tu carga tributaria (hasta 24.000) ya que podés deducir tus aportes del Impuesto a las Ganancias. Tomes la decisión que tomes, es importante que lo hagas con conciencia y de manera constante.